Muchas
veces nos peleamos con nuestra pareja y nos abruman las cosas negativas de
volver a estar soltera. Solo pensamos en lo que no haremos juntos, en la pena
que te da que todo se haya terminado, te deprimes y lloras. Pero, ¡Un momento!
Te olvidaste de pensar en las ventajas que tiene estar soltera nuevamente. Toma
nota y verás que no es tan malo como parece.
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¡Come lo que te gusta! SÍ,
eres la única dueña y señora de tu nevera, puedes preparar tus comidas
favoritas sin necesidad de compartir o ver que le gusta a él y que a ti para
hacer algo que los satisfaga a los dos, ¡El chocolate es tuyo, sólo tuyo! Nadie
va a robarte la última porción de esa torta tan rica ni tendrás que compartir
el chocolate, si…siempre le dejabas el ultimo bocado a él, ¡ahora es solo para
vos! No hay nadie que te contradiga, si te apetece la comida china, pues sale
comida china o el plato que te venga en gana. Picotear y no cenar, eres reina y
señora de tus horarios para comer, beber sin tanto preparativo ni protocolo... ¿Tu
figura? Fantástica, porque llevaras un control de lo que ingieres y si tus
calorías quieres que provengan hoy solo de helado pues, date el gusto y mañana seguirás
la dieta del nutricionista.
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Ligar, fantasear, ir mirarando a
otros chicos... ¡todo
está permitido! Pues estás soltera, si deseas ligar con un chico que has
conocido esa misma mañana, mirar de reojo el trasero al morocho de la oficina e
imaginártelo sin ropa, todo vale, fantasear con toda tranquilidad no tiene
precio, sin culpa ni castigo, con todos los tíos que se cruzan en tu camino, si
quieres tener una aventura, pues bien, si estás sola no te tienes que quedar
con las ganas ni sentir culpa, ¡déjate seducir!
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¡Duerme como te parezca! Ya no compartes cama, salvo que
quieras llevar a un chico para pasar un buen momento la cama es sólo para ti.
Cuando se comparte la cama con una pareja siempre hay disputas de quien tiene
esta parte la otra, es complicado encontrar tu sitio para no molestar al otro,
pero ya no... Sola puedes dormir en diagonal, cruzada, del lado que te plazca,
hacer la estrella de mar, o acurrucarte y abrazarte a los almohadones ¡todo te
está permitido!
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Cuestión de la sábana: Ya no tendrás que luchar por tu
porción de sábana o enredón, a partir de ahora nadie te lo quitará. Lo podrás
usar, enrollarte en él, sacarlo, patalear dentro, y nadie se quejará: “¡eh, tienes
toda la sábana para ti, déjame un poco!”
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Vestimenta anti intimidad.
Ya no tendrás a los mata-relaciones, como los calcetines, esa remera
rota que le trae recuerdos, los pijamas viejos o las camisetas talla XXL...
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El ropero, ¡todo para ti! Ya dispones de todo el armario para
vos sola, sin quejas por la cantidad de vestidos que tienes ni por los 40 pares
de zapatos que tanto amas y ellos desconocen el porqué de tantos. Se acabaron los
reproches., ¡todo el armario y todos los cajones son tuyos, tuyos y solo tuyos!
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Volver a casa sin mirar la hora en el reloj. Ya no tienes que rendir cuentas, ni dar
explicaciones, en resumen, se acabaron las obligaciones. Puedes salir los días
que quieras, pasar veladas hasta el final de la noche, e incluso llegar tarde
del trabajo sin previo aviso.
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¡No estás obligada a estar siempre
arreglada! Ya puedes
relajar tu look, en tu día de descanso si no tienes ganas de arreglarte pues,
¡anda en pijama todo el día! Puedes estar todo el día en tu casa, incluso sin
tener ni la más mínima intención de darte una ducha y nadie tendrá nada que
decir. TV, DVD, CD: ver y escuchar lo que tú quieras. ¡Eres dueña del control
remoto nuevamente!
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Tragarse el fútbol, boxeo o la Fórmula
1... pelearse para
ver que se ve, si deportes, una película en una cadena o lo que sea y tú te das
vuelta mientras que ponen el partido del siglo en otra, ¡eso ya es historia!
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¡Gasta tu dinero como tú desees! Puedes gastar tu dinero cómo y dónde quieras.
No necesitas programar con otra persona tu economía. Se acabó el sentido de
culpa porque te compras un par de zapatos o ese vestido que tanto te gustaba
cuando no habían planeado el gasto. Además, ahorras el dinero de los reglaos de
Navidades, San Valentín, aniversario... ¡Eso lo puedes gastar en ti misma sin
tanto problema ni reproche!
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Se acabó el ir limpiando por donde él
pasa. Ya no tienes
que correr detrás de él recogiendo las cosas que va dejando. Bajar la tapa del váter levantada ya
es historia, limpiar lo que él no hace por olvidadizo o por dejado ya es
pasado.
·
Ya no tienes que lidiar con sus amigos
juerguistas Apechugar
con los amigos de tu novio era otra tarea extra. Grandes bebedores que
entendían que ese era el objetivo de la reunión, oírlos hablar de fútbol o
contarse aventuras y desventuras de la última reunión que tuvieron... ¡sinceramente
eso no era para ti! A partir de ahora tú elijes que programa se hace cada
noche, elijes amigos, charlas, intereses comunes con gente que quieres. ¡noches
entre amigos y nuevos reencuentros!
Pues estar en pareja es lindo, pero si
la pareja se rompió, ¡estar soltera es maravilloso! Disfruta de esta nueva
etapa y date todos los gustos, disfruta de tus amigos, vuelve a hacer esas
cosas que no podías porque a él no le complacían, déjate ser. Ser soltera es
una experiencia para disfrutar todos los días.